Déjate cautivar por la elegancia y la historia con este excepcional reloj de pared de la prestigiosa manufactura de Francois Desiree Odobez en Morez, Francia, desde 1843. Esta joya atemporal es una verdadera obra maestra que fusiona la belleza del diseño con la precisión de la ingeniería relojera.

La estructura de bronce brinda una sensación de nobleza y durabilidad, resaltando la artesanía meticulosa de la época. Las pesas macizas, también en bronce, y el pendulo con forma de guitarra son detalles que añaden encanto y singularidad a este reloj histórico.

La esfera esmaltada, de un blanco nítido, lleva el nombre del fabricante y su origen en Morez, grabados con elegancia, junto con la fecha de manufactura, conectándonos con la historia y la autenticidad de esta pieza única. Rodeando la esfera, una corona en bronce embellecida con ramos de flores de época y la representación de una dama y un caballero, evoca un estilo romántico y encantador, transportándonos a la elegancia de una era pasada.

Las pesas colgadas contribuyen al funcionamiento impecable de esta maravilla mecánica. La máquina, procedente de Morez, es una verdadera rareza, ya que suena las horas y medias con repetición de las horas. La sonería, que se escucha tanto sobre campana como sobre varillas, es un tributo a la maestría técnica de la época, produciendo una melodía envolvente y armoniosa que ha sido minuciosamente revisada por nuestro relojero experto.

Este antiguo reloj de pared, con su encanto antiguo y su funcionamiento excepcional, es el complemento perfecto para un salón distinguido, aportando no solo la medición precisa del tiempo, sino también una pieza de conversación y admiración para aquellos que aprecian la belleza y la historia.

Este reloj antiguo resalta la belleza estética, la historia y la funcionalidad excepcional de un reloj de pared francés de Morez, invitando a los coleccionistas  a apreciar su valor como una auténtica obra maestra de la época.

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